Desde la Oficina pel Pla Pilot de la Renda Bàsica de Catalunya se llevará a cabo el experimento más ambicioso hasta la fecha de hoy realizado en Europa. En 2024, con los resultados en mano, se podrán evaluar los potenciales beneficios de una renta básica en nuestro país.

Hay muchos motivos y algunos muy preocupantes por los que la Renta Básica está bien presente en el debate político. Cada día que pasa la RB es más conocida, justamente porque cada día se hace más necesaria y oportuna que nunca.

Hay por lo menos cuatro motivos que quisiera considerar:

El primero: en los dos últimos años se ha producido una aceleración de la concentración extrema de las rentas y la riqueza, a la vez que un incremento de la pobreza, las grandes desigualdades y una situación permanente y estructural de dificultades económicas entre buena parte de la población.

Hace pocos días se publicaron los datos de un macro estudio publicado en algunos diarios en los que se informa que el 10% de la población más rica concentra el 52% de las rentas y el 76% de la riqueza del planeta (es decir, ¡las tres cuartas partes del patrimonio mundial!), mientras que el 50% más pobre sólo capta el 8% de los ingresos y el 2% del patrimonio.

Los datos en Catalunya en cuanto al riesgo de pobreza y exclusión social según la tasa Arope son del 26% de la población, una situación que afecta destacadamente a las mujeres (27,8%), a los menores de 18 años (35,9%), a la gente con nacionalidad extranjera (61,6%) y con niveles formativos de Primaria o inferiores (36,9%). Éstos son los peores datos de pobreza de los últimos 10 años, ya que de este millón seiscientas mil personas, unas 850.000 estarían en una situación de pobreza severa, una pobreza que se ha duplicado en los últimos diez años, en buena parte porque las políticas sociales que se han aplicado en esta última década no han funcionado.

Y este es el segundo aspecto clave que también tendremos que poder debatir y analizar a fondo y que nos ha llevado a iniciar este Plan Piloto: por qué fallan las políticas condicionadas en la lucha contra la pobreza y, por tanto, por qué necesitamos una Renta Básica individual, universal e incondicional.

Actualmente existe suficiente evidencia empírica que demuestra la ineficiencia e ineficacia de muchos programas de prestaciones condicionadas en todo el mundo. La literatura científica y muchos organismos internacionales como la Comisión Europea o la ONU llevan años identificando muchos de los problemas inherentes a estas políticas o prestaciones condicionadas como son el estigma social, las bajas tasas de cobertura, su poca intensidad, las no solo solicitudes de mucha gente, las denegaciones, las trampas de la pobreza, los costes administrativos y de recursos humanos, sobre dimensión de las tareas burocráticas, etc.

Y aquí va la tercera idea clave: considerar la individualidad (entender los cambios en la estructura demográfica y sociocultural), la incondicionalidad (las situaciones vitales son vez más variantes y frágiles) y la universalidad (tenemos que poder cubrir a la gente antes de que caiga en la pobreza) como pilares fundamentales para el nuevo modelo de bienestar social. Es necesario un cambio de paradigma.

Debemos poder garantizar la existencia material del conjunto de la ciudadanía y también permitir una mayor cuota de libertad a toda la población.

Sabemos también que un experimento como este presentará unas limitaciones que hay que poner de manifiesto antes de empezarlo: no podremos introducir reformas fiscales para redistribuir la riqueza, tampoco conseguiremos reducir las desigualdades, en sólo dos años habrá que ver cómo se comporta la gente que participa, es imposible encontrar territorios representativos al 100%…

En los últimos años, la atención mediática recibida por los experimentos de Renta Básica que se han realizado en diversos lugares del mundo han contribuido también al incremento de la popularidad de la Renta Básica entre el conjunto de la población.

El plan piloto que queremos impulsar desde el Govern de Catalunya quiere ser generoso y ambicioso, tanto en lo que se refiere a la muestra de población: que sea de unas 5000 personas, como de la cuantía a recibir, que queremos situar alrededor del umbral de la pobreza en Catalunya: unos 900 euros y que tenga una duración de 24 meses.

Irá dirigido a algunos municipios y barrios (a concretar) para replicar lo máximo posible la diversidad y la heterogeneidad del territorio aunque es imposible poder hacerlo del todo.

Y aquí viene la cuarta cuestión: poder contestar por qué es adecuada o acertada la propuesta de una RB:

  • ¿Cómo puede impactar una prestación individual e incondicional en la vida de las personas y en su entorno inmediato?
  • ¿Qué ocurre en la vida de una persona cuando dispone del mínimo económico necesario para cubrir sus necesidades básicas y no vivir en una situación de pobreza e inseguridad económica?
  • ¿Qué impacto puede suponer ese cambio respecto a su vida y su propia autopercepción? ¿Y en la reducción del estrés y la mejora de la tranquilidad psicológica y en la salud mental?
  • ¿Qué supondrá en la vida de muchas mujeres tener unos ingresos individuales? ¿Y en la vida de la juventud?
  • ¿Habrá mayor participación social y favorecerá la solidaridad entre la gente?
  • ¿Se generará mayor confianza entre las personas y con las instituciones?
  • ¿Facilitará la creatividad y la iniciativa en proyectos cooperativos?

De estas y otras preguntas podremos obtener respuestas con el plano piloto.

El Plan cuenta ya con el asesoramiento y seguimiento de un consejo Asesor (con personas destacadas por su trayectoria activista, por su valía académica y profesional en la materia). También contará con la supervisión y seguimiento de un Consejo ético necesario en cualquier proyecto de esta tipología.

La puesta en marcha de la Oficina del Plan Piloto para implementar la Renta Básica Universal del Govern de la Generalitat es una buena noticia y una oportunidad para avanzar en la transformación social de una sociedad y un mundo que presenta graves problemas de desigualdades sociales y altos índices de pobreza, que no podemos obviar y que no podemos cansarnos de denunciar.

Bien, se trata en definitiva de “cavar los cimientos de una vida más alta” como cantaba Ramon Muntaner, recientemente desaparecido, con letra de Pere Quart.

Fuente: https://catalunyaplural.cat/es/la-oficina-pel-pla-pilot-de-la-renda-basica-de-catalunya-despega-estas-son-sus-razones-propuestas-y-objetivos/